Fics Spanish HP Fakes

ALHENA: -¡Miram!- Grito desde el salón en el que me encuentro junto a Alzir. Quiero que venga para ir juntos a ver a papá a la sala de música, donde creo que está él después de que mamá se haya ido a comprar.

ARYA: -¡Voooy!- Grito mientras cierro la puerta de mi dormitorio tras abandonarlo corriendo. Bajo las escaleras muy deprisa y entro en el salón.

 ALZIR: Doy un salto del sofá y me paro delante de este. -¿Ya estamos?- Alzo las cejas con una sonrisa.

ALHENA: Me pongo en pie de un salto tras mi hermano y voy hasta Arya cuando cojo la bolsa con nuestro regalo, que está sobre la mesa. -Vamos...- Susurro. -¡Hay que ir despacito para que se sorprenda!

ARYA: Asiento sonriendo con intensidad mientras me agarro al brazo de mi hermano. -No hagáis ruido...

ALZIR: Camino en puntillas y espero que Alhe lidere el grupo. "Vamos". Muevo la mano y gesticulo sin hacer el menor ruido.

ALHENA: Sigo a mi hermano pero me adelanto a los dos encabezando la fila. Con rapidez, recorremos el pasillo de la planta baja intentando no hacer ruido mientras las notas del piano llegan a nosotros.

ARYA: Escucho las dulces notas del piano de papá, mientras hacemos los pasos aún más ligeros, a medida que nos acercamos a la puerta de la sala del piano.

ALZIR: Sigo de a pasos pequeños, me siento un dibujo animado haciendo eso. Al llegar a la puerta me detengo cuando casi choco con Alhena.

ALHENA: -Oh.- Me quejo al ver que Alzir casi me da. -Cabezón...- Mascullo antes de abrir la puerta y entrar dentro. Con sigilo, avanzo hasta pararme tras papá y le doy el regalo a Miram para que se lo dé.

ARYA: Cojo el paquete que me tiende mi hermana, en el que hemos guardado el telescopio mágico que hemos comprado esta mañana con mamá. Es pequeño y coge en cualquier parte ya que se adapta incluso al tamaño de un bolsillo. Antes de poner el regalo delante de su rostro, miro a mis hermanos para que podamos decir al unísono: "Feliz día del padre", tal y como hemos acordado hacer. 

DONOVAN: Me vuelvo con rapidez con el corazón acelerado al oír las voces de mis hijos a mi espalda. Las últimas notas del piano agonizan con un estrepitoso sonido. Pero nada es más valioso que la emoción y las sonrisas en los rostros de mis pequeños: -Mis niños...- Murmuro emocionado ante esa felicitación. Abro los brazos para abrazarles.

ALZIR: Mi sonrisa se amplia cuando papá se da vuelta y me abalanzo sobre él cuando abre sus cálidos brazos. Esos en los que siempre me siento mucho mejor.

ALHENA: Siguiendo a Alzir y después de dedicarle una mirada cómplice a mi hermana pequeña, me uno al abrazo con los ojos cerrados. Feliz... Muy feliz...

ARYA: Después de mis hermanos, me abrazo a ti, abrazando a todos al mismo tiempo. Me siento dichosa por tener al mejor padre del mundo. -Felicidades, papá.

DONOVAN: Os rodeo entre mis brazos sintiéndoos tan pequeños e inocentes que me duele pensar que ya quede tan poco tiempo para que empecéis en Hogwarts y os vayáis lejos de mí. Un fuerte beso se queda marcado en cada una de vuestras mejillas y me aparto de vosotros para poder veros: -Gracias, mis niños...- Doy una palmada. -A ver, ¿qué tenéis para papá?- Pregunto con una sonrisa mirando vuestros traviesos ojos.

ALZIR: Sonrío a la pequeña Arya a la espera de que le de el regalo.

ALHENA: Cuando papá pregunta, no puedo evitar reír.Y mis ojos siguen los de Alzir para mirar a Arya.

ARYA: -Toma papá.- Digo tendiéndote el paquete, tras mirar a mis hermanos. -Feliz día del padre. 

DONOVAN: Siempre que abro un regalo me siento como un niño pequeño. Ahora podría decirse que me encuentro con un momento en el que podría compartir todo con esos pequeños que, frente a mí, me regalan la vida con solo respirar. -Estoy nervioso...- Confieso riendo mientras mis dedos temblorosos rompen el papel para descubrir una caja no muy grande y, dentro de esta, un telescopio mágico. Sé cómo es porque los he visto muchas veces en esa tienda del Callejón Diagón y, cuando era pequeño, siempre quise uno. -Oh...

ALZIR: Junto mis manos esperando a ver que dice luego de ese "Oh" pero estoy seguro que por la cara que ha puesto si le gusta. Llevo mis manos hasta abajo de mi mentón.

ALHENA: -¿Te gusta?- Pregunto impaciente por saberlo.

ARYA: Miro a mis hermanos y sonrío. Después miro a papá y espero a que responda a Alhena. 

DONOVAN: Asiento con la cabeza, conteniendo la emoción en mi garganta. En mis manos, observo el telescopio y lo alzo ante nuestros ojos. -Me encanta...- Me pongo en pie con ello en la mano. Es pequeño, pero puede ser más grande, o diminuto. Es mágico... -¿Sabéis?- Paso mi brazo tras vuestros hombros haciéndoos girar. -Quiero probarlo.

ALZIR: -¿Ahora?- Con las cejas bien alzadas al preguntar y mi voz llena de emoción y expectativa, me reprimo de dar un saltito. -¡Si!

ALHENA: Río por culpa de Alzir y, caminando junto a papá, salimos juntos de la sala de música donde se han quedado a dormir las notas interrumpidas.

ARYA: Río ante las palabras de mi hermano y miro a papá. -¿Te ha gustado entonces, papi? 

DONOVAN: -Mucho, mi pequeña...- Acaricio el sedoso pelo de Arya cuando cruzamos la puerta del jardín y el suave aire de marzo nos recibe. Buscar estrellas en el cielo no es difícil. Acostumbrados mis ojos a hacerlo tantas veces, mis pupilas ya están tan arraigadas a ellas que no podrían vivir sin su luz. Junto a mis pequeños, escruto el cielo del atardecer entre estrellas. Pero, ¿qué mejores estrellas que las que yacen a mi lado?


Leave a Reply